Sapito acollarado del Socopo

Nombre científico: Mannophryne lamarcai

Autoridad taxonómica: Mijares-Urrutia y Arends, 1999

Notas taxonómicas:

Sinónimos:

Phylum: Chordata

Clase: Amphibia

Orden: Anura

Familia: Dendrobatidae

Género: Mannophryne

Categoría: En Peligro Crítico En Peligro Crítico

Criterio: B1ab(iii)

Nombres comunes:

sapito acollarado del Socopó, rana piripiri del Socopó, Socopo rocket frog, Socopo poison-arrow frog, Socopo collared frog

Descripción:

Se trata de una especie diurna que habita entre la vegetación herbácea adyacente a cuerpos de agua. Los machos cargan a sus renacuajos en la espalda como ocurre con otras especies del mismo género. Se distingue de sus congéneres por la combinación de una banda dorsolateral oscura (indistinta en las hembras y en los machos más oscura), una banda oblicua de color amarillo en los flancos de las hembras, un collar estrecho (en hembras adultas y en algunos machos), el vientre blanco pálido con amarillo periférico en las hembras, extremidad del hocico casi truncada, y otras variaciones en la morfología de los dedos del pie (Mijares-Urrutia y Arends 1999a, Mijares-Urrutia y Arends 1999b).

Distribución:

Especie endémica del estado Falcón en el noroeste de Venezuela. Es conocida solamente en la localidad original de colección, ubicada en el cerro Socopó, a una altitud de alrededor de 1.250 m, a 30 km al suroeste de Guajiro, municipio Mauroa (Mijares-Urrutia y Arends 1999a, Mijares-Urrutia y Arends 1999b). El Cerro Socopó, es la mayor elevación terrestre en la margen oriental del lago de Maracaibo. Por su singular importancia al habitar en una región montañosa cercana a la Cordillera de los Andes, más afín geológicamente con las laderas del norte de Venezuela, las comparaciones taxonómicas que se hagan a futuro entre esta especie y otras del género arrojarán datos significativos para interpretar la biogeografía entre ellas.

Situación:

Es una especie muy poco común de la cual se desconoce su estatus poblacional, aun cuando se supone su disminución debido a las alteraciones que ha experimentado su hábitat. Su distribución potencial es menor a los 100 km2 (Mijares et al. 2004). La última vez que fue colectada ocurrió en 2004 (La Marca 1994d, Mijares-Urrutia y Arends 1999a, Mijares-Urrutia y Arends 1999b, IUCN et al. 2006). En el ámbito internacional, tanto en la Evaluación Global de los Anfibios, como en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza se le ha clasificado en la categoría En Peligro Crítico (IUCN et al. 2006, IUCN 2014).

Amenazas:

La destrucción acelerada de su hábitat por deforestación y otros cambios en el uso de la tierra parecen ser las amenazas actuales más importantes que enfrenta el sapito acollarado del Socopó. Originalmente la vegetación de la zona era un bosque nublado, que ha sido transformado en área de pastoreo para ganado vacuno. La especie también puede estar afectada por la contaminación derivada de las actividades humanas en el margen de distribución y sus cercanías, algunas de las cuales pudieran, incluso, ocasionar lluvias ácidas; igualmente le perjudica la contaminación por aceite de motor y el cambio climático. Otro de sus riesgos posibles es la infección por quitridiomicosis. En la colección original de Mannophryne lamarcai se observaron distintos tipos de deformidades en las extremidades, desde una palmeadura notablemente malformada hasta la total ausencia de la mano o el pie. Entre las causas más probables de dichas anormalidades, se consideraron la intoxicación por derivados del petróleo o la fuerte caída del pH a causa de lluvia ácida (Mijares-Urrutia y Arends 1999a, Mijares-Urrutia y Arends 1999b).

Conservación:

En el ámbito internacional todos los géneros de la familia Dendrobatidae están incluidos en el Apéndice II del CITES, y la Comunidad Europea los incorpora en su regulación 338/97. En Venezuela no se ha tomado medida alguna para la conservación de la especie. Su distribución no forma parte de áreas protegidas y su remanente de hábitat se reporta como muy reducida, por lo que se requieren medidas urgentes para su resguardo. En especial, se debe brindar protección legal a la fauna del cerro Socopó debido a la acelerada destrucción de este remanente único de bosque nublado en el sitio, y al alto valor para la biodiversidad de anfibios de la zona; además, este lugar presenta una situación geográfica privilegiada, con bosques nublados aislados, que la convierten en un lugar de gran interés biogeográfico. Aunque la herpetofauna del sector es poco conocida, se sabe que cuenta con varias especies únicas y aparentemente endémicas, entre las que destacan los amenazados Leptodactylus magistris y Dendropsophus amicorum. Es importante ahondar en la evaluación del estatus de conservación, situación taxonómica y biología de la especie, con énfasis en su distribución, que podría ser mayor a la reportada (Mijares-Urrutia y Arends 1999b).

Ilustrador: Ximenamaria Rausseo

Autores:

Abraham Mijares-Urrutia y Enrique La Marca

Cita sugerida

Mijares-Urrutia, A. y La Marca, E., (2015) Sapito acollarado del Socopo, Mannophryne lamarcai, En: J.P. Rodríguez, A. García-Rawlins y F. Rojas-Suárez (eds.) Libro Rojo de la Fauna Venezolana. Cuarta edición. Provita y Fundación Empresas Polar, Caracas, Venezuela., Recuperado de: www.especiesamenazadas.org/taxon/chordata/amphibia/anura/dendrobatidae/mannophryne/sapito-acollarado-del-socopo Miércoles, 24/04/2024